Guanajuato.- Nuevas construcciones dañan la imagen de Guanajuato Capital, ciudad patrimonio de la Humanidad.
El gobierno priista del municipio de Guanajuato otorgó al ex director de Desarrollo Urbano (2012-2015), Sergio Knapp Aguilar, un permiso para construir una torre de 13 niveles en la entrada de la ciudad, que rompe con la imagen urbana y el paisaje natural de la Ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Aunque los funcionarios de Antropología no objetaron la obra, el delegado del INAH, Sergio Tovar Alvarado, lamentó que privilegien los intereses económicos por encima de la imagen de la ciudad.
Atrás de la glorieta Santa Fe, ubicada en la entrada de la ciudad de Guanajuato, es construida la plaza comercial Galereña.
La torre tiene 13 niveles, 10 serán para oficinas y bancos, tres para un estacionamiento con capacidad para 465 vehículos y tendrá 27 locales comerciales.
De acuerdo con una ficha informativa, elaborada por el actual director de Desarrollo Urbano Carlos Manuel Morril Yllades, fue Sergio Knapp quien solicitó el permiso para la construcción de la torre.
El siete de abril del 2016, el Consejo de Asesores del Ayuntamiento, aprobó el proyecto y recomendó no construir el estacionamiento a nivel de calle y ser “muy estrictos en la imagen urbana con respecto a los anuncios a colocar, no anuncios luminosos, no espectaculares. Se sugiere que el edificio de oficinas tenga menor altura”.
Paisaje Natural
Aunque la torre de 13 niveles está fuera del área de monumentos y de la zona de Patrimonio Mundial, la obra daña la imagen natural de la cordillera de cerros, consideró el delegado del INAH, Sergio Tovar Alvarado.
La plaza Galereña es un mal precedente para el municipio de Guanajuato, por ser el primer inmueble de 13 niveles y porque otros empresarios podrían construir edificios similares.
“Se sigue agrediendo al patrimonio, se sigue construyendo desordenadamente, va llegar un momento en que no va ser posible el cuidado y la protección. Esta zona de Guanajuato debe de cuidarse, es la entrada, estamos acostumbrados a ver las montañas verdes, ahora nos encontramos bloques y edificaciones”, recriminó Sergio Tovar.
“Nada más se mueven por los intereses económicos, desafortunadamente”, lamentó antes de saber que los empleados del INAH avalaron la obra.
Delgado Zárate consideró que la torre “rompe abruptamente” con la cordillera de cerros cuando los guanajuatenses y turistas llegan a la ciudad por la autopista Silao-Guanajuato.
La obra fue avalada por el Consejo Municipal de Asesores del Ayuntamiento, integrado por el alcalde, Edgar Castro Cerrillo; por funcionarios, ciudadanos, por representantes de la Universidad de Guanajuato (UG) y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).