León, Gto.- El cambio de gobierno en León es el más violento del que se tenga registro.
Los niveles en el municipio son inimaginables más de 80 asesinatos en lo que va del nuevo gobierno, tan inimaginable como la incapacidad de los responsables en los órdenes de gobierno para poder mitigar ésta situación que lastiman y muy profundo.
Pero lo más terrible de la situación, es que la captura de los culpables es mínima, se vive en León en un estado de angustia, desolación e injusticia. ¿Hasta cuándo permitiremos como sociedad que las autoridades sigan sin dar resultados. Es necesario a caso ser víctimas para que entendamos la gravedad de lo que se vive en el municipio y el estado?
Aquí en León hay continuidad de los responsables de la seguridad, no son nuevos en las tareas y estrategias, pero son incapaces de dar resultados y aún así los siguen manteniendo.
No podemos acostumbrarnos a la violencia, no debemos y tampoco lo merecemos. Nuestra ciudad debe ser pujante, llena de oportunidades para la sociedad, en constante crecimiento y desarrollo para todos.
Se necesita un gobierno empático y sensible, donde la vida de los ciudadanos, así como la de los funcionarios municipales, policías asesinados y trabajadores de SAPAL que murieron por la inadecuada capacitación y equipamiento, no sean solo números y parte de la estadística.
No se gobierna con retórica, se gobierna con convicción, acciones verdaderas, carácter, decisión y aprovechando todo el tiempo y las oportunidades a nuestro alcance. Los problemas son infinitos, los presupuestos nunca alcanzan, por lo que hay que ser audaces, creativos y fuertes.